Una simpática historia sobre lo que de verdad importa, acompañada de ilustraciones coloridas y muy divertidas.
Érase una vez un sabio tan sabio que ya no tenía nada que aprender. Por eso, un buen día, decidió salir a recorrer el mundo. Pero, por mucho que investigó, no descubrió nada nuevo... hasta que en la selva conoció a un mono que no sabía nada.
¿Podrá aprender algo de un mono que ni siquiera sabe distinguir entre un plátano y una banana?