Ruperto es un caimán muy extraño, no solo es gordo, muy gordo y con forma de pera, sino que no come otros animales, se alimenta de aguajes, camu camu, plátanos y hasta papayas. Le gusta pasear por la selva observando a los humanos y ayudando a todo aquel que puede, sin esperar que se lo agradezcan. Lo único que quiere don Ruperto Distinto (que ahora así lo llaman) es hacer un mundo distinto. |